El agua, ese líquido incoloro, inodoro e insípido que, sin embargo, mantiene a casi todo el planeta Tierra con vida. Formamos parte de ella, ya que nuestro cuerpo está formando por un 70% de este elemento, pero no solemos darle la importancia que se merece. Y no solamente la necesitamos para vivir, sino que es fundamental para nuestra higiene y salud. Sin agua, no hay nada.
Pero, ¿sabemos exactamente qué es este líquido? ¿Que hay más allá de una molécula de agua? ¿Qué la convierte en una fuente de vida? Hoy vamos a adentrarnos en el microscópico mundo del agua y descubrir toda la magia que contiene. ¡Vamos allá!
¿Qué es una molécula de agua?
Empecemos por el principio: el agua es una sustancia líquida compuesta por 2 átomos de hidrógeno y 1 de oxígeno unidos por un enlace covalente. De ahí que su fórmula sea H2O. La molécula de agua es polar, por lo que tiene un polo positivo y otro negativo. El agua es una molécula neutra, pero está formada por un elemento muy electronegativo (oxígeno) y por otro electropositivo (el hidrógeno). Esto le confiere un carácter dipolar. Es decir, la molécula actúa como si por un extremo tuviera una carga negativa y por el otro una positiva.
Funciona igual que los imanes: ambos lados son capaces de unirse entre sí y a otras moléculas, formando puentes de hidrógeno. Esos puentes hacen que cada molécula pueda establecer débiles enlaces con otras tres. Por eso el agua es líquida a temperatura ambiente o es capaz de disolver muchas sustancias.
Veamos cuáles son las principales características del agua:
- Es el solvente universal. Aunque ya lo hemos comentado brevemente, queremos insistir en esta cualidad maravillosa del agua: puede disolver sustancias. Para ser más exactos, puede hacerlo con sustancias polares, como ella misma. Gracias a esta habilidad, el agua es capaz de transportar nutrientes y minerales y es incapaz de disolverse en aceite (es una sustancia apolar). El agua disuelve muchas sustancias y las retiene, aunque varíe la temperatura. Su capacidad de disolver los nutrientes del suelo es fundamental para que las plantas puedan absorberlos a través de sus raíces. Además, esta capacidad permite que algunos procesos metabólicos de los organismos vivos se mantengan estables a pesar de las oscilaciones térmicas.
- Es un gran conductor de la electricidad. Todos sabemos que jamás puedes manipular electrodomésticos con las manos mojadas, ya que las sales minerales que el agua puede llevar disueltas en ella la convierten en un puente perfecto para toda esa electricidad que quiere fluir (en este caso, a través de nosotros).
- Es la única sustancia capaz de transformarse en los 3 estados de la materia: sólido, líquido y gaseoso, de manera natural en nuestro planeta. Lo curioso del agua es que, cuando se encuentra en estado sólido, su densidad disminuye, a diferencia de lo que ocurre con la mayoría de sustancias. Por eso el hielo flota en la superficie y permite que el agua que está bajo él no se congele y la vida continúe como si nada ocurriese.
- Su punto de congelación es 0 °C, mientras que el de ebullición es 100 °C. Posee un gran calor específico, por lo que para aumentar su temperatura necesita absorber mucha energía. Esta característica permite que pueda regular el clima, relajando temperaturas extremas.
- ¿Alguna vez te has preguntado por qué ciertos insectos o las hojas, por ejemplo, pueden flotar? Se debe a la tensión superficial del agua. La fuerte atracción entre cada molécula de agua hace que todas juntas se unan en la superficie con enlaces muy fuertes. Este hecho hace posible que pequeños elementos, si se posan con cuidado, floten.
- Si la atracción a otras moléculas es más fuerte que hacia sus congéneres (las de agua), estas son capaces de adherirse a ellas y, literalmente, escalar en contra de la gravedad. Esta característica puede parecer poco importante para nosotros, pero es fundamental para que sustancias como la savia se distribuya por el tejido de las plantas.
- El agua tiene un pH 7 neutro, por lo que no es ni ácida ni básica. Es muy importante para las reacciones químicas y procesos biológicos que tienen lugar en medio acuoso.
- El sonido y el agua se llevan de maravillas. Para las ondas sonoras, este líquido es el medio perfecto para viajar sin apenas pérdidas. Es una cualidad muy apreciada por animales cetáceos y submarinos, cuyo medio de comunicación es el agua.
Propiedades físicas de una molécula de agua
Ahora que ya sabemos algunos datos de la molécula del agua, entremos en materia. Además de todas las características que hemos comentado, el agua tiene ciertas propiedades físicas muy interesantes, que ayudan a que la vida se siga produciendo en nuestro planeta:
- Su densidad es de 1g/cm3.
- Tiene un calor específico y de vaporización elevados. Esto provoca que el calor liberado en reacciones bioquímicas exotérmicas sea fácilmente absorbido y/o eliminado con poca variación de la temperatura en el individuo.
Propiedades químicas de una molécula de agua
Aunque hemos hablado de algunas características químicas arriba, conviene ampliar algo de información:
- Como hemos comentado, las moléculas de agua son dipolares: se orientan alrededor de partículas polares o iónicas, formando una envoltura de solvatación. Esto provoca una modificación de las propiedades de estas partículas.
- Contiene minerales y nutrientes de gran valor.
- Reacciona a óxidos ácidos, básicos y al metal.
- Fusionada con sales se forman hidratos.
Importancia de las propiedades físicas y químicas del agua
El agua posee ciertas propiedades físicas y químicas que la convierten en portadora de vida para nuestro planeta, tanto para ecosistemas como para animales (entre los que nos encontramos los humanos). Sin ella, no podríamos vivir. Las grandes masas de agua, como los océanos, almacenan el calor que reciben del sol y lo liberan lentamente, regulando todo el clima de la Tierra y permitiendo, tanto directa como indirectamente, la vida.
Plantas y animales equilibran su temperatura mediante la transpiración o sudor. Usan la propiedad del agua de transformase en vapor absorbiendo calor. Además, actúa como vehículo para que los animales se desprendan, a través del sudor y la orina, de sustancias que, acumuladas, serían perjudiciales para el organismo.
El agua es vida(s)
La molécula de agua recorre prácticamente todo nuestro cuerpo y está presente en todos los tejidos de nuestro organismo, además de en los órganos vitales. Su presencia es fundamental en procesos como la digestión, absorción y eliminación de desechos metabólicos no digeribles. Ayuda a que tengamos una temperatura corporal más o menos estable, ya que ayuda a eliminar el calor sobrante a través de la transpiración de la piel.
El cuerpo debe mantener un perfecto equilibrio entre el agua que ingresa y la que sale. Igual de malo es sufrir una falta de líquido que una sobrecarga. Nuestro organismo no tienen un órgano que se encargue de almacenar agua, por lo que es necesario estar bebiendo constantemente para restituir las cantidades de que se van perdiendo. Podemos vivir semanas sin comida, pero apenas unos días sin agua. Por eso es tan importante adquirir un hábitos y beber agua regularmente, sobre todo en estaciones de calor.
La sed, en el cuerpo humano, se controla en el hipotálamo, una de las regiones centrales del cerebro. Si la concentración de plasma en sangre aumenta el cuerpo está perdiendo agua y comenzando a deshidratarse. En ese momento el ‘mecanismo de la sed’ se pone en marcha: el cerebro envía una señal para provocar la sensación de sed e instar al cuerpo a que busque agua. La boca seca por falta de saliva también puede ser un indicativo de falta de líquido.
Hay que tener en cuenta, para poder valorar la importancia del agua, que todas las células de nuestro cuerpo y del resto de animales viven en ella. Tanto sumergidas como bañadas en fluidos o distribuidas en el agua en sí (río, océano, lago…), la composición de la materia necesita el agua para florecer. De ahí que se diga que ‘venimos del agua’. Es, junto con, el carbono, uno los elementos químicos más importantes del desarrollo celular.
Agua Peñaclara
Esperamos que ahora aprecies un poco más ese vaso de agua que te tomas todos los días y entiendas que, cuando tomas agua, bebes vida. Haznos caso, que entendemos del tema. En Peñaclara le tenemos un gran respeto a este líquido transparente y lo tratamos con amor, cuidado y cariño. Nuestra historia de agua se remonta, según la leyenda, a la época romana. Se dice que un senador romano viajó de Calahorra a Torrecilla en Cameros a cuidarse en sus baños (actualmente Peñaclara), referenciado en una carta de donación en 1029.
A partir de ese momento, el agua de Peñaclara se ha convertido en referencia por sus propiedades de pureza original y naturalidad. Estas características la convierten en una bebida esencial para reponer la cantidad de agua que nos hace falta. Sus oligoelementos, su idónea concentración y su interacción con el metabolismo humano son los que han conferido al agua sus diferentes propiedades terapéuticas.
Peñaclara es la marca de Agua Mineral Natural más conocida y consumida de La Rioja. Es el Agua de La Rioja. Si quieres saber más de nuestra agua, puedes ponerte en contacto con nosotros o visitar nuestra tienda. ¡Estaremos encantados de atenderte!