Los experimentos de agua con niños son una excelente opción para motivar a los niños en la época de regreso al cole después de las vacaciones navideñas. Además de que estas actividades permiten disfrutar del tiempo en familia y crear recuerdos, también divierten a los pequeños y les permiten aprender.
Es fascinante cómo estos experimentos, que no requieren materiales complicados, pueden despertar la curiosidad de los niños y niñas, enseñándoles sobre la importancia vital del agua en nuestras vidas y brindándoles la oportunidad de explorar más sobre este líquido imprescindible. ¡Es hora de sumergirse en la diversión!
La importancia del juego y los experimentos
Si no se les explica a los más pequeños de la casa qué es el agua y de dónde viene, es posible que simplemente la asocien a los grifos que pueden encontrar en el baño o en la cocina y creer que de ellos puede brotar toda el agua que quieran. Es importante, desde pronta edad, educar a los niños y niñas sobre el uso responsable y sobre cómo se obtiene. Hay personas en el mundo a las que acceder a ella puede costarles horas o incluso días, por lo que es necesario que la aprecien y entiendan, a su vez, que se puede agotar.
Por ello jugar a realizar experimentos con agua puede ayudarles a entender de dónde proviene, cuáles son sus propiedades y cualidades y si se puede acabar. Sabemos que a veces puede ser complicado mantener la atención de los niños al enseñar algo y entretenerlos al mismo tiempo. De ahí que proponer juegos o actividades pueda ser tan beneficioso:
- Concienciación. Una de las bases de estos experimentos, como hemos comentado, es ayudar a que los niños entiendan que el agua es un recurso natural limitado. Así comprenderán cómo funciona, lo que les motivará a cuidarla, conservarla y prevenir su contaminación.
- Aprendizaje. Estos experimentos les permiten descubrir y entender conceptos científicos acordes a su edad y explicados de forma adecuada a ella. Cuando se les explica de forma divertida aumenta su interés por distintas ramas de la ciencia e incluso pueden descubrir una pasión.
- Trabajo en equipo. Trabajar en este tipo de ‘proyectos científicos’ hace que los niños aprendan la importancia de colaborar y respetar a sus compañeros o familiares, además de desarrollar otras muchas facultades como la paciencia.
- Diversión y aprendizaje. La diversión y el aprendizaje van de la mano. Cuando los niños aprenden a través del juego, retienen mejor el conocimiento al asociarlo con una experiencia divertida.
Experimentos con agua para niños y niñas
Además de entender los conceptos que sacarán como conclusión con los experimentos, también adelantaremos una de las clases de ciencia más importantes: los estados del agua. Será imprescindible que, antes de comenzar, entiendan los estados sólido, líquido y gaseoso. Seguramente ya lo hayan dado en el colegio, pero para ponernos con este tipo de actividades es siempre recomendable que el adulto que esté con ellos y los controle durante todas las fases de los experimentos les ‘refresque’ la memoria.
Además de eso necesitaremos los materiales que mencionaremos para cada experimento y mucha ilusión por parte de sus integrantes. Todos los que vamos a comentar explicarán conceptos básicos y simples sobre las propiedades del agua que resultan curiosas y atractivas para niños curiosos. ¡Vamos allá!
Tensión superficial del agua
Comenzamos con uno de los experimentos más comunes con agua para niños, no solamente porque es muy fácil de desarrollar sino porque la ‘teoría’ también es simple.
Solo necesitarás un vaso y agua. Tu peque tendrá que llenar el vaso de agua hasta el borde sin derramar ni una sola gota. Seguro que se dará cuenta (si no, puedes comentarlo sin presión) de que hay una parte del líquido que parece ‘flotar’, es decir, que está por encima del borde del vaso. Es en este momento cuando toca explicar lo que es la tensión superficial del agua: ocurre porque la unión entre las moléculas de agua es más fuerte que la fuerza de la gravedad sobre esa pequeña cantidad de líquido que sobresale. Al final, si continuáis añadiendo agua, se desbordará, ¡pero es un experimento muy interesante!
¿Por qué el agua y el aceite no se mezclan?
La pregunta del siglo y a la que a veces incluso a los adultos les cuesta responder: ¿por qué el agua y el aceite no se mezclan? Este experimento podrá explicar, de forma muy visual, las propiedades de ambos líquidos.
Para llevarlo a cabo simplemente hay que poner en un vaso agua y aceite. Conforme vayamos vertiendo el segundo componente veremos que no se mezclará, por mucho que se intente. Puedes conseguir un recipiente con tapa para que el peque agite todo lo que quiera la mezcla y vea que es imposible de fusionar.
Ahora viene la explicación: el agua actúa como un ‘imán’, tiene polos positivos y negativos, mientras que el aceite es una molécula neutra y, por lo tanto, no cuenta con atracción hacia las moléculas polarizadas del agua. También se deba a que el aceite es más denso que el agua, por lo tanto, siempre flotará en la superficie y nunca se hundirá hasta el fondo.
Flotar gracias a la sal
Ahora cambiamos el aceite del anterior experimento por la sal para llevar a cabo una actividad nueva. Llena un recipiente con agua hasta más de la mitad y coloca suavemente un huevo en el agua. Haz notar a tu peque que este alimento se hunde sin ningún tipo de resistencia. Tal y como está, ves añadiendo poco a poco cucharaditas de sal, hasta que el huevo acabe flotando.
Este fenómeno es el mismo que ocurre cuando flotas en el mar, cosa que si vives en la costa o habéis estado de vacaciones en alguna zona cercana al mar habrás notado. Las aguas con sal sufren un aumento de densidad por este elemento, cosa que hacer que los objetos (o las personas) floten. Cuando la densidad del agua esté lo suficientemente alta para soportar su peso, el huevo flotará.
Huevos de dinosaurios
Si con algo podemos llamar la atención de la mayoría de niños y niñas es con los dinosaurios, especialmente con los huevos. Para este experimento necesitarás figuritas de dinosaurios (de cualquier especie), globos, agua y tijeras.
Mete las figuras por la boca de los globos y llénalos con agua. Ata cada uno de ellos y mételos en el congelador hasta que se conviertan en bloques de hielo. Después corta el globo con unas tijeras y retira cualquier resto de plástico que quede en el hielo. Coloca los ‘huevos’ resultantes en un recipiente grande y deja que tus hijos los disuelvan con agua caliente para descubrir las figuras de dinosaurios en su interior y aprender a su vez los estados por los que pasa el agua. Es una forma divertida y visual de entenderlos.
Pompas de jabón
Crear pompas de jabón es uno de los experimentos con agua para niños ideal para disfrutar de una tarde entretenida en la que, de paso, los más peques (y los no tan pequeños) aprenderán algo. Para realizarlo se necesita jabón, agua, una cuerda y dos palos para sumergirlos en la mezcla y moverse con ellos para lograr pompas de gran tamaño.
Las pompas de jabón flotan porque el aire caliente que contienen es más ligero que el aire que las rodea. La tristeza es que el fenómeno es muy efímero porque la capa de agua que rodea la burbuja es muy delgada. Esto significa que el aire escapa rápidamente, provocando que la burbuja se rompa en poco tiempo. Sin embargo, ¡podréis disfrutar en familia de un fenómenos fascinante y precioso!
Agua que va hacia arriba
Este experimento suele ser uno de los favoritos de los niños y niñas porque les ayuda a ver y entender cómo el agua puede llegar a desafiar incluso a la gravedad al subir.
Para llevarlo a cabo necesitarás 3 vasos, papel de cocina, agua y colorantes de varios colores. Llena 2 vasos hasta la mitad con agua y agrega un colorante diferente en cada uno. Después dobla 2 trozos de papel de cocina a lo largo, haciendo que salgan 4 tiras, y coloca un extremo en un vaso con colorante y otro extremo en el vaso vacío. Repite el proceso con el otro color de agua. Verás cómo el vaso vacío se llena poco a poco debido a que las moléculas del líquido tienen afinidad entre sí, permitiendo este fenómeno de ascenso del agua por el papel. Esto ya lo sabían los romanos y es un fenómenos que les ayudó mucho en sus posteriores creaciones arquitectónicas.
La distorsión de la visión
El contacto con el agua puede alterar la apariencia, tamaño o volumen de los objetos. Basta con agregar gradualmente gotas de agua a una moneda utilizando una pajita. Los peques podrán observar cómo la superficie de la moneda cambia, creando la ilusión de que aumenta su volumen. Este fenómeno se debe a la refracción, un proceso óptico en el que las ondas electromagnéticas del objeto varían su trayectoria al entrar en contacto con agua, generando esta entretenida transformación visual.
Con estos experimentos con agua para niños y niñas seguro que los peques de la casa aprenderán el valor de este líquido y los increíbles procesos que es capaz de realizar. Educar desde el respeto por el medio ambiente (en el que se incluye el agua) y la realidad de que todo lo que tomamos de la naturaleza es limitado puede ayudar a crear seres humanos con consciencias mucho más realistas y empíricas con su entorno.
Desde Peñaclara nos enorgullece poder proporcionar este líquido de vida y explicar que trabajamos el agua con todo el respeto que le podemos mostrar. Nuestra agua se caracteriza por su pureza original, ya que llega a nosotros tal y como se encuentra en la naturaleza. Es de origen subterráneo, protegida de todo tipo de contaminación y con una composición constante en minerales que le confieren propiedades favorables para la salud. Porque cuidar el planeta es cuidarnos a nosotros mismos, apuesta por un agua tratada como se merece, con amor y cariño. Si quieres conseguir nuestros productos o tienes alguna duda sobre el proceso, puedes ponerte en contacto con nuestro equipo, que te ayudará a encontrar la solución más adecuada a tus necesidades.
