Hoy en día, el agua con gas es la bebida de preferencia de muchas personas, y es que su popularidad no ha hecho más que crecer estos últimos años. Y las razones son muchas: desde ser una bebida sustitutiva de las bebidas azucaradas, hasta su contribución para una buena salud intestinal.
El consumo, habitual o puntual, del agua con gas presenta muchos efectos positivos que puede que no conozcas. En este artículo, te contaremos todo lo que tienes que saber sobre los beneficios del agua con gas: cuáles son sus principales características y ventajas, los mitos en relación con su consumo, y algunos consejos clave para tener en cuenta antes de consumirla. ¿Comenzamos?
¿Cómo se produce el agua con gas?
Las burbujas del agua carbonatada surgen del anhídrido carbónico. En términos generales, existen 2 tipos de aguas con gas:
- Aquellas que brotan del manantial ya carbonatadas. Esto se atribuye a la profundidad y la temperatura a la que surge el agua, que favorecerá o desfavorecerá el ácido carbónico.
- Agua Mineral Natural a la que se le añade ácido carbónico tras brotar del manantial. Aunque este sea un proceso artificial, no es nada invasivo ni afecta la pureza del agua, bajo ninguna circunstancia.
La versatilidad del agua con gas
En la actualidad, hay una tendencia creciente del consumo de agua con gas en prácticamente todos los grupos de edad. Por las características inherentes que presenta, es una bebida de lo más versátil, satisfaciendo diferentes necesidades en diferentes momentos.
Por ejemplo, a aquellas personas que les cuesta llegar a la ingesta de agua aconsejada por un día (que recordemos que es alrededor de 1,5-2L al día, dependiendo de cada individuo), el agua con gas se les presenta como la alternativa perfecta; a menudo les resulta mucho más llevadera y fácil de beber que un vaso de Agua Mineral Natural.
Al mismo tiempo, es una buena forma de cuidar la salud, ya que se sabe que al tomar agua gasificada en vez de refrescos azucarados, se evita consumir azúcar en exceso. Justamente, el Journal of Oral Rehabilitation publicó un artículo sobre una investigación médica que señala que el agua mineral con gas resulta hasta cien veces menos dañina para los dientes que una bebida tipo refresco azucarado.
Beneficios del agua con gas
Previamente, ya hemos hecho mención de algunos beneficios del agua con gas, y sin embargo, aún faltan más. Entre los más importantes podemos encontrar los siguientes:
- Hidrata en profundidad: El AMN con gas, al igual que el AMN sin gas, colabora en la hidratación del cuerpo. En concreto, el agua con gas permite que esta hidratación tenga un toque distintivo, y por lo tanto, apetezca más beberla.
- Colabora en la digestión de las proteínas: El agua gasificada, además de hidratar, ayuda a digerir las proteínas de los alimentos, ya que aumenta la segregación de los jugos gástricos. Esto resulta en un proceso digestivo más ágil.
- Es nutritiva: Al igual que el agua sin gas, esta bebida tiene una composición mineral tan rica como el Agua Mineral Natural. En ella encontrarás potasio, magnesio y calcio, entre otros.
- Genera sensación de saciedad: El agua con gas, por su pH ácido, convierte el anhídrido carbónico en dióxido de carbono y esto genera presión contra las paredes del estómago, generando sensación de saciedad. Así, puede convertirse en el aliado perfecto para aquellas personas que tengan dificultades para regular su apetito o busquen bajar algo de peso. Sin embargo, bajo ninguna circunstancia el agua con gas puede sustituir una comida. Desde Peñaclara recomendamos seguir cualquier tipo de régimen alimentario de la mano de un profesional de la salud, para asegurar vuestra salud física y mental.
- Es un gran sustituto del refresco: El agua gasificada puede funcionar como un sustituto perfecto del refresco azucarado. Por ejemplo, puedes agregarle rodajas de limón, pepino e incluso menta, que saborizan tu bebida mientras cuidan de tu salud.
Mitos de consumir agua con gas
Ahora que ya te contamos los beneficios del agua con gas, podemos derribar los mitos que circulan alrededor de su consumo. Veámoslos uno por uno:
«El agua con gas daña la dentadura»
Negativo. Está científicamente comprobado que la acidez del agua con gas, al no ser muy elevada, es incapaz de corroer los dientes.
«El agua con gas engorda»
No, el agua gasificada no engorda. Las bebidas que sí pueden provocar aumento de peso son aquellas ricas en azúcar como los refrescos; inconscientemente asociamos las burbujas con los refrescos azucarados, así que pensamos erróneamente que también se aplica al agua con gas.
«No se puede beber agua con gas durante el embarazo»
Falso. Puedes beber agua con gas tranquilamente durante el embarazo. La sensación de saciedad que puedes sentir ocurre por la presión que se ejerce sobre el estómago cuando crece el bebé dentro del útero.
«El agua con gas daña los riñones»
Negativo. De hecho, la realidad es justo lo contrario: el agua con gas beneficia a los riñones y a todos los órganos del cuerpo, ya que la hidratación colabora en el correcto funcionamiento del cuerpo.
«El agua gasificada disminuye el calcio»
No, la disminución del calcio en el cuerpo no ocurre con el agua con gas, pero sí con los refrescos azucarados. Su consumo excesivo puede generar disminución en la densidad mineral ósea.
¿Cuándo no se recomienda consumir agua con gas?
Si bien los mitos más frecuentes sobre el agua con gas han sido desmitificados, sí hay situaciones en las que se desaconseja el consumo de agua con gas de manera preventiva. Cuando una persona tiene gases, por ejemplo, no se aconseja beber agua gasificada, ya que podría agravar la hinchazón o distensión abdominal. Otra de las ocasiones en las que se no se recomienda consumir agua con gas en cuando se tiene reflujo o acidez, debido a que su pH ácido puede elevar la acidez estomacal. Tampoco es conveniente beberla si se sufre de EPOC o insuficiencias respiratorias, para evitar generar presión en el pulmón y, por último, no resultaría beneficioso en casos de celiaquía, colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn, o intestino irritable, ya que el consumo de agua con gas podría ser perjudicial.
Los profesionales indican que aunque el agua con gas presenta muchos beneficios, no puede sustituir por completo el consumo de Agua Mineral Natural. Lo ideal sería que su consumo fuese complementario: combinar agua con gas y AMN hasta alcanzar los 8 vasos diarios, por ejemplo.
Agua con gas Peñaclara
En Peñaclara, incorporamos burbujas a nuestra Agua Mineral Natural para que puedas disfrutar de todos las beneficios del agua con gas. Contamos con diferentes formatos de agua con gas que puedes consumir según la ocasión. La botella de 50 cl con gas y la botella 33cl con gas son versiones ideales para beber durante las comidas o en un reuniones con amigos.
El Agua Mineral Natural con gas de Peñaclara no solo cuida tu salud, sino que además cuida el medioambiente, ya que cuenta con un envase de vidrio para que puedas disfrutarla de una manera ecológica. Si quieres saber más sobre nuestras aguas minerales, ¡no dudes en contactar con nosotros! También tienes a tu disposición nuestro Newsletter. ¡Únete a nuestra comunidad y entérate antes que nadie de todas nuestras novedades!